Las Redes Sociales, aparte de ser un gran canal para promocionarnos como profesionales y para competir como negocio de una forma a la que antes no hubiésemos tenido acceso, es un mundo en el que es necesario guardar muy mucho las formas y no cometer errores de comportamiento, siendo fundamental mantener una actitud informal, si queremos, pero a la vez absolutamente profesional.
Una vez hemos hecho nuestra incursión en el mundo dospuntocero y empezamos a hablar y a interactuar en plataformas como Twitter, lo primero que es necesario pensar es “¿qué diríamos a la audiencia si nos llaman por teléfono?”.
Algo que no debemos hacer bajo ninguna circunstancia es ignorar a quien quiere hablar con nosotros, incluso si lo que nos tienen que decir es negativo. No olvidemos que a veces los usuario son clientes descontentos con nuestra gestión o con cualquier aspecto de la marca, y atender a su queja, sugerencia o crítica es para nosotros es una forma de mejorar.
Al igual que cuando charlamos con alguien por teléfono no dejamos la conversación a medias, en Social Media, tampoco. Si el contenido que compartimos genera una interacción de algún usuario, ya estamos en una conversación, por lo que es fundamental seguirla. Esto es algo que puede generar un gran engagement con ese usuario. No le pongamos el buzón de voz.
De la misma forma, debemos ser coherentes, mantener un hilo en la conversación. No debemos cambiar de tema si no es preciso, imagínate que un posible cliente te pide información y en medio de la conversación le preguntas por su color favorito. No tiene razón de ser.
Tampoco debemos abusar de los mensajes automatizados, ya que eso da un aspecto robótico a nuestra presencia online, y lo que estamos buscando es precisamente lo contrario, humanizar las relaciones todo lo posible, y, ser agradecido. Los usuarios no tienen por qué compartir tu contenido, no tienen obligación, y, el hecho de hacerlo implica que nosotros debemos estar agradecidos, sobre todo, si pensamos en la gran cantidad de contenido que hay circulando por la web y en que, de entre todo ese contenido, han elegido el nuestro.
Es fácil, sólo hay que utilizar lo que hemos aprendido de nuestros padres y aplicarlo en la relación con los otros usuarios en Social Media.