Si miramos en internet y realizamos una búsqueda acerca de cómo escribir un post de forma adecuada y efectiva, encontraremos muchísimos artículos que cuentan las virtudes y beneficios de escribir correctamente y de forma que nuestra audiencia se “enganche” a nosotros, pero con mucha frecuencia, se nos olvida destacar un pequeño detalle, para muchos irrelevante, que es tan importante o más que el mero hecho de escribir una entrada para nuestra bitácora estructurado, con contenido interesante y con llamadas a la acción.
Se trata de crear un buen título. Como digo, un buen título es el gancho perfecto para que nuestros potenciales lectores sepan de qué vamos a hablarles, para que ellos mismos sean los que juzguen si lo que tenemos que decir es interesante o relevante para ellos o no.
Tal es la importancia de crear un buen título, que podríamos decir que este elemento es lo que nos proporciona el derecho a los diez segundos de atención del lector, pero, para que esto quede más claro todavía si cabe, pongamos un ejemplo.
En televisión emiten diariamente un programa concurso presentado por Carlos Sobera, Atrapa un Millón, en el que parejas de concursantes deben responder una serie de preguntas para ganar dinero suficiente como para comprar el derecho a volver a la edición que se emite el fin de semana y comprar la pastilla dorada que les otorga el derecho de concursar por un millón de euros.
El título es exactamente lo mismo, cumple la misma función. Es lo que nos da el derecho a que la audiencia nos lea, es la forma de atraer la atención del lector de forma y manera que nos otorgue sus diez segundos de atención, tiempo en el que debemos ser capaces de engancharle a nuestro contenido, ya que, si no lo conseguimos se irá en busca de información a otro sitio(no perdamos de vista que internet es una enorme base de datos donde hay una gran cantidad y variedad de recursos en la que debemos tener la habilidad de diferenciarnos).
Aunque muchos piensan que lo importante es el cuerpo del artículo en sí, lo cierto es que el título es la puerta de entrada a un buen contenido, que nos garantiza que el lector volverá a nosotros ávido de información.
El título debe encerrar la esencia del artículo en una sola línea, y, a ser posible, debe ser breve y conciso, directo pero a la vez amplio en su significado, y relevante, insistimos, para nuestra comunidad.
Con toda seguridad podemos afirmar que un título que no enganche no generará tráfico ni se viralizará por las Redes Sociales, no cumplirá con su cometido, de ahí la importancia de prestarle toda la atención. Uno de los recursos más usados y más efectivos es crear una pregunta que incite al debate, así como crear un título llamativo sin caer en lo vulgar o soez, incluso hacer una llamada apelativa al lector. Cualquier recurso es válido siempre que lo usemos de manera adecuada y respetando los protocolos estipulados.
En muchas ocasiones tendemos a pensar que un título llamativo debe contener expresiones malsonantes creyendo que eso es un uso simple pero correcto del lenguaje. Craso error. Un título con esas características lo único que hará es que nuestro post no sea bien acogido por la comunidad. Al igual que el usado en el resto del artículo, el lenguaje de nuestro titular debe ser impecable. Es nuestra tarjeta de visita, no lo olvidemos.
Por tanto: un titular debe ser directo, conciso pero que recoja lo básico de nuestra argumentación, correcto en forma y contenido y adecuado al tono de nuestras publicaciones.
¿Y tú? ¿Qué importancia das a los títulos? ¿Crees más importante el contenido?