En un mundo abrumado por la infoxicación, la elaboración de contenidos que destaquen y sean de interés para los usuarios se convierte en una dura batalla si no tenemos en cuenta determinados factores previos que nos ayuden en el posicionamiento.
Antes de nada, ¿qué significa «posicionar» bien en internet? Significa que te encuentren de manera simple y sencilla cuando el perfil de quienquiera que tengas definido, esté buscando algo relacionado con tu sector, actividad o intereses.
Perfecto, pero ¿para qué?, ¿de qué nos sirve estar en la primera página de resultados de un buscador? Pues para atraer visitas ¿y para que queremos visitas?¡ Para convertir!. Ya sean ventas, suscripciones o simples direcciones de correo electrónico: posicionamiento sin conversión no sirve de nada.
Varias nociones por tanto son fundamentales antes de ponerse a escribir, grabar o filmar contenidos como locos. ¿Sabemos para quién los creamos?, ¿sabemos qué quieren saber nuestros potenciales visitantes?, ¿conocemos el lenguaje de cada red social en que pretendamos difundirlos?, ¿tenemos una estrategia de curación, elaboración y difusión establecida?
Redactar un post, grabar un podcast o filmar una pieza de vídeo por el simple motivo de que «quiero posicionar la palabra bricolaje» puede que no nos dé ningún resultado si quien quieres que convierta en tu página busca «martillos baratos» o «cómo repara con masilla una grieta»
De la importancia de tener claro estos conceptos y otras cuestiones intentaremos dar respuesta en próximo día 23 en la Cámara de Comercio en la charla de presentación del programa de Máster en Social Media Marketing. ¿Nos vemos? Inscribete aquí.
Y aquí tienes la presentación que realicé, para refrescar conocimientos.